La habitación era tranquila y enorme. La cama era super cómoda. - Me ha gustado mucho tener una bañera. - La ubicación del hotel era perfecta, cerca de una estación de tren, de la parada de autobús y de numerosos restaurantes. - El local Brown Cow estaba cerca, ahí íbamos a relajarnos.

El mejor lugar para alojarse en Zermatt. Habitaciones muy bien decoradas. Personal servicial en la recepción. Excelentes desayunos con muesli, fruta y ingredientes frescos.

La habitación era bonita

Lo que no te cuentan, ¡esta junto al cementerio!. Las vistas a las montañas son vistas al cementerio (con las montañas detrás)

La habitación es de buen tamaño y tiene Wi-Fi y un muy buen wifi. Ofrecen servicios excelentes.

Este lugar está situado en una hermosa área, cerca de la iglesia, con habitaciones amplias y funcionales, un desayuno excelente de 3 estrellas, un dormitorio precioso con una cama enorme y un baño espacioso.

Estaba bien situado, a un minuto andando de la calle principal de Zermatt. Las habitaciones son limpias y amplias.

Las vistas de la habitación al cementerio. El wifi se estropeó, mucho calor en la habitación y el desayuno muy pobre

Me ha gustado Zermatt, el hotel era fantástico, en el centro de la ciudad. La habitación era lo suficientemente espaciosa y funcional, tenía una decoración cómoda y un balcón y una zona de estar. El personal en general era bastante amigable y agradable. La ubicación era estupenda, estaba fuera de la carretera principal. Más aún, estaba cerca de varios lugares, como una estación de autobuses y el teleférico. Los platos del hotel que pedimos eran buenísimos, y encontramos el Brown Cow en la zona. Aquí se nos proporcionó un servicio excelente:)))

Este lugar tiene una ubicación perfecta, a solo un corto paseo de la estación de tren, y ofrece habitaciones de buen tamaño con balcón, calefacción y vistas espléndidas.

Muy pintoresco y muy cómodo encontrar a María en recepción que habla español con mucha amabilidad.

Una habitación hermosa con comodidades como caja fuerte, zona de estar y mesa de trabajo; con increíbles vistas a la ciudad y desayunos deliciosos con una variedad de muesli y frutas frescas.

El hotel está muy bien situado, cerca del centro y de numerosos bares y restaurantes. Además, se encuentra al lado de la iglesia, lo cual le da un encanto especial. Las habitaciones son amplias y confortables, con camas muy cómodas y vistas idílicas al Matterhorn. La recepción es atendida por personal amable y simpático, dispuesto a ayudar en todo momento. El desayuno ofrecido es variado y delicioso, con opciones para todos los gustos.

El único aspecto negativo es que el personal de recepción no habla varios idiomas, lo cual puede dificultar la comunicación para algunos huéspedes.

Ubicación excelente, comodidad de acceso a pistas y transporte, céntrico. Recepción amable y simpática, chocolates de despedida. Personal acogedor, en especial Julio y sus colegas políglotas. Vistas idílicas al Matterhorn, habitación amplia y cama cómoda.

Me gustó todo.

El Hotel Antika es una excelente opción para aquellos que buscan una estancia cómoda y asequible en esta encantadora localidad alpina. En primer lugar, la ubicación del hotel es inmejorable, con vistas al famoso puente y mirador del Matterhorn. Es un verdadero placer despertarse cada mañana y contemplar esta majestuosa montaña desde la comodidad de la habitación.

Nada que objetar. Todo fue excelente en este hotel.